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miércoles, 3 de noviembre de 2010

Travestismos y otras jubilaciones

Ahora, que no se habla de otra cosa en Europa más que de la dichosa edad del retiro profesional, se anuncia LA JUBILACIÓN, así con mayúsculas, del que fue, para los que tenemos más edad que la obligatoria, el símbolo viviente de nuestra alegre rebeldía juvenil, allá por los lejanos años sesenta.

Se jubila Daniel Cohn Bendit.

Diputado europeo por el partido de “Los Verdes”, acaba de anunciar su renuncia a presentarse a las elecciones del 2014.

¡No se me desmelenen, nostálgicos incurables del adoquín parisino! Se nos jubila sí, pero no se nos va.

¿Cómo se arreglará este hombre para ser siempre la cereza del pastel?¿Para encontrar sempiternamente el nicho de la actualidad en el que mantener, enhiesta como el primer día, la bandera de su insaciable narcisismo? ¿De dónde le vendrá esa capacidad asombrosa para la provocación? Bueno, si pensamos que empezó por ser judío y alemán justo después de la guerra, pues eso…

Su delicada pituitaria debe de haber detectado, desde hace tiempo, el sospechoso olor a naftalina que estaba sustituyendo a la fresca fragancia de lo verde, a medida que este se tornaba melancólicamente amarillento, como es propio en el otoño de las ideologías.

Fino lebrel de la comunicación, –su auténtica pasion– ha declarado su intención de llevar a cabo un nuevo ejercicio de travestismo, reciclándose esta vez, o actualizándose como se dice ahora, en “consultor de futbol” de esa “empresa oxímoron” (gauchiste-capitaliste) llamada Canal Plus France.

En una palabra, decidió cambiar de lado, en la ventanilla de los jubilados, como afirma genialmente Luc Rosenzweig en “Le Causeur”.

Se escapan a mi entendimiento las oscuras concomitancias que pudieran existir entre los exabruptos de los ecologistas de su partido, ante los apocalípticos desmanes del desarrollo, y los alaridos “ostentoreos” de los espectadores ante un penalty injusto. Se pierden entre los umbrosos repliegues de esos misteriosos fenómenos de masas que son los partidos de futbol o los partidos a secas.

Tal vez la hierba –o alguna hierba- podría constituir el eslabón perdido entre ambos hechos socio-culturales.

Hasta aquí la noticia. Y digo yo…¿Qué pasaría si el ejemplo cundiese en un país como el nuestro? Ya sé, ya sé… la hipótesis de la retirada voluntaria de un político aquí, no se le ocurriría ni al que asó la manteca. Pero…¡que no cunda el pánico! Es solo un juego.

¿Qué tal la metamorfosis de Llamazares en ingenioso humorista televisivo?

¿Y Rajoy con airosa capa encintada como líder de púa, en una tuna de bandurrias?

¿No sería genial ver a Pérez(Rubalcaba) tocando las maracas y agitando sus mangas de volantes, como vocalista vacilón de un combo salsero?

Impagable resultaría el reciclaje de la señorita ¬–¡huy perdón!– Aído, en asesor@ artístic@ de una compañía de variedades en “El Molino”.

Nadie mejor que el rector Gabilondo, en su calidad de catedrático de metafísica, para llevar a cabo una profunda mejora en la estética facial de los pollos de Simago.

Por no mencionar el avance sideral que supondría en la calidad del servicio, si Rodriguez(Zapatero) utilizara su natural habilidad para el braceo, como instructor de la banda de sardanas del cuerpo de Marines.

Cuantos disgustos nos ahorraríamos, si el etarra Otegui decidiera, por fin, abandonar su alegre ocupación de animador de verbenas terroristas de fin de semana, para entregarse en cuerpo y alma a la doma de insectos sifonápteros, en un circo de pulgas.

La precisión semántica de un Chaves –el nuestro– demuestra que somos un país de despilfarro. ¡Mira que no haber sabido aprovecharlo como probable líder mundial de ese interesantísimo fenómeno cultural que son las tabarras de los telepredicadores raperos! ¿De veras no lo veis con su gorrilla del revés y los pantalones colgones por debajo de la rabadilla? Incompresible.

En fin amigos, perded toda esperanza. Ninguno de estos probos servidores públicos está por la labor de abandonarnos a nuestros nefandos vicios de libertad individual, que nos conducirían directos al cataclismo. Su inquebrantable generosidad no se lo permite.

Nunca jamás veréis al@ compañer@ Fernández(de la Vega) patroneando una trainera en las regatas de S.Sebastián. Su siempre adusto gesto indica a las claras el inmenso sufrimiento que esa renuncia a su auténtica vocación le produce.

Esta triste realidad patria, me ha provocado de pronto una gran melancolía.

Me voy al botellón de la plaza de Chamberí. Ciao.

1 comentario:

  1. Cohn Bendit siempre ha sabido vivir del cuento y tirarse todo lo que se movía. Fíjate lo mucho que se habla de las confesiones dragonianas y lo poco que se recuerdan las aventuras de bragueta del bueno de Daniel en su Kindergarten. En lo que sí coinciden ambos comunicadores es en el deseo de provocar -lo cual les permite seguir en el machito mediático, aunque sea negativamente- y la afición por la maría, no precisamente Fontaneda. Hoy día la cultura es un pretexto y la política es incapaz de suscitar entusiasmo. Sólo queda el ruido mediático, el negocio audiovisual. Me parece muy lógico que el tío Daniel se nos reconvierta en locutor futbolero. Los aprovechateguis como el tío Cohn-Bendit se apuntan a un bombardeo con tal de que les paguen. Acabaré viendo a Cohn Bendit dirigiendo Faes o revestido de la púrpura cardenalicia o dirigiendo el Corral de la Morería. Lo que sea, pero con una cámara delante y una alcachofa en la mano. No es más que una cuestión de tiempo.

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